Proceso de desamortización y cambios agrarios.

Proceso de desamortización y cambios agrarios.

Con el nuevo cambio de sociedad se debe modernizar el campo, cambiar el mundo feudal por un mundo capitalista.

Las desamortizaciones serán positivas por consolidar el Régimen Liberal y negativas por no permitir el desarrollo
industrial.

Análisis de la desamortización
El proceso desamortizador se produce en el contexto de un Estado liberal burgués cuyo interés principal es disponer de medios para poder pagar los intereses y los capitales de la Deuda Pública, para financiar obras públicas y consolidar un modelo de propiedad privada de la tierra, dentro del plan de la reforma agraria que mejorará la agricultura española. La razón principal de la desamortización fue el déficit de Hacienda.

CAUSAS
  • Causas estructurales, por los grandes cambios estructurales sociales.
§  Causa ideológicas: propiedad privada.
§  Causa hacendística: problema de la deuda del Estado y la escasez de dinero.
§  Falta de dinero para mantener la lucha contra el carlismo y pagar a los ejércitos extranjeros aliados.
§  Reforma del sistema tributario: proyecto posterior a la desamortización.
  • Causas político- económicas, maximalización del rendimiento entregando al interés individual la masa de bienes de la nación, para hacer más ventajosa la agricultura y el comercio.
  • Causas político-ideológicas: Crear una masa de propietarios liberales y anticlericales.
EFECTOS
La desamortización civil y eclesiástica produjo una enorme transformación en la regulación de la propiedad y la consolidación de la propiedad privada. Pero los que pudieron comprar fueron la alta burguesía, la aristocracia, los funcionarios, comerciantes, militares…que tenían dinero.

El proceso desamortizador
Los intentos por iniciar un plan desamortizador tienen antecedentes históricos cuando Godoy inició acciones desamortizadoras para conseguir recursos. Más tarde las Cortes de Cádiz promulgaron una ley de desamortización de los bienes de los señoríos eclesiásticos. En la época de Fernando VII en el Trienio Liberal se promulgó la ley de desvinculación de los señoríos y la ley de incorporación al Estado de los bienes religiosos. Pero el gran momento desamortizador coincide con la etapa isabelina.

Etapa isabelina.
En el momento de las regencias se produjo la disolución de las órdenes religiosas, se promulgó la Ley de Bienes Nacionales y se decretó la conversión de las tierras yermas y los bienes del patrimonio real en propiedad particular. En la Década moderada se produjo la abolición del régimen señorial, al desvinculación de los mayorazgos y la desamortización civil y eclesiástica.

DESAMORTIZACIÓN ECLESIASTICA DE MENDIZÁBAL
En 1836 se promulga la ley de desamortización de Mendizábal que ordenó la disolución de las órdenes religiosas (monasterios, conventos, monumentos...) y la nacionalización de esos bienes. Los bienes se expropiaron, divididos en lotes y reprivatizados en subasta pública. El plan era luchar contra el déficit, crear una base de compradores liberales y luchar contra el carlismo. Se dictó La Real Orden de legalización de ventas y ocupaciones de tierras comunales. La desamortización de Mendizábal tiene varias fases:

  •  La labor legisladora en 1835, siendo Mendizábal ministro de Hacienda en el gobierno Toreno con el Real Decreto de supresión de los monasterios de las órdenes monacales.
  • En 1836 se declaran en venta todos los bienes de las instituciones suprimidas y todos los nacionales: los bienes confiscados a los afrancesados, de los jesuitas, las órdenes militares y la de S. Juan de Jerusalén, los conventos y monasterios, ciertos bienes de la Corona y los sitios reales y la mitad de vacíos y realengos.
  • Concordato de 1851 las instituciones eclesiásticas podrán adquirir bienes a cambio de que la Iglesia reconozca las ventas ya realizadas. El Estado mantiene el culto y el clero.

DESAMORTIZACIÓN CIVIL DE MADOZ
En el Bienio Progresista. En 1855 la desamortización de Madoz afectó a los bienes de la iglesia, del Estado, de las órdenes militares, cofradías, instituciones benéficas y los Ayuntamientos, produciendo un gran volumen de venta. Objetivo: conseguir recursos para Hacienda, la modernización del país y la construcción del ferrocarril. Se aprueba la Ley General de Desamortización implicando la nacionalización de los bienes de propiedad municipal y eclesiástica. Se abarcó lo civil y eclesiástico a excepción de: los bienes comunales vecinales, las minas de Almadén y las salinas, los edificios de beneficiarios a instrucción y los palacios obispales. Los problemas con la iglesia producen una ruptura con Roma, que traerá problemas a la monarquía. En los Ayuntamientos se vendieron muchas tierras comunales y entre 1855 y 1867 se subastaron muchas fincas. La nueva legislación favoreció el establecimiento de 5000 kms de ferrocarril y la creación de una ley de Sociedades Anónimas de Crédito.

El mapa de la desamortización
La propiedad se fue concentrando. En el sur el latifundio, se mantuvo la concentración de la propiedad y una proletarización del campesino. En el norte el minifundio, pequeños propietarios que cada vez fragmentarán más las propiedades.

Consecuencias de la Desamortización
  • Tierras malvendidas al usarse un sistema de venta en subasta, sigue el problema del déficit.
  • La intención fue positiva pero no se pudo crear una clase media campesina impidiendo el desarrollo agrario español.
  • Sumisión liberal a los intereses de la nobleza.
  • Bienes eclesiásticos, se venden a precios ridículos a aquellos que poseían títulos de Deuda Pública.
  • Los campesinos arrendatarios y jornaleros no pudieron adquirir nada por no tener dinero ni apoyo del Estado.
  • En lo económico un dato positivo: el empleo de las roturaciones permitió la extensión de la superficie cultivada y más producción.
Valoración de la desamortización: fracaso de la reforma agraria.
  • En lo agrario, se consolidó el latifundismo y el minifundismo tradicionales y se produjo la desaparición de las tierras comunales. Desde el impulso de la industrialización aumentó la producción agraria, aumentaron los alimentos y creció la población. Aumentó la superficie cultivada y al comercialización de los productos. Pero estos avances son escasos.
  • En lo social, se da un empeoramiento social de los pequeños arrendatarios al elevar los censos o ser sustituidos por grandes arrendatarios que cultivaban las tierras con cuadrillas de subarrendatarios en malas condiciones. No se creó una clase media campesina que hubiera estabilizado el régimen liberal.
  • En lo político, los campesinos tendrán una actitud contraria a los regímenes liberales. En el siglo XIX los campesinos apoyarán el carlismo y en el XX se unen al anarquismo agrario.
  • En lo económico, la nobleza y la burguesía se limitarán a los cultivos extensivos. La Deuda Pública no disminuyó sino que aumentó y no se llevó a cabo la reforma de la Hacienda.