TEMA 9. Crisis del
Antiguo Régimen. Guerra y Restauración.
El proyecto de federación europea de Napoleón Bonaparte, bajo
la hegemonía francesa, impulsa la coalición de las naciones contrarias, Rusia,
Prusia, Inglaterra y Austria, que les combaten y derrotan en Waterloo en 1815.
Napoleón impone el Tratado
de Fontainebleau, que facilita el despliegue del ejército francés en
España
, e interviene de forma directa en el conflicto que se produce entre la familia real española. Este conflicto es interpretado por Napoleón como un hecho que propicia la inestabilidad en la federación de naciones e interviene directamente. Consigue en Bayona que le cedan la corona española, que entrega
a su hermano José I.
, e interviene de forma directa en el conflicto que se produce entre la familia real española. Este conflicto es interpretado por Napoleón como un hecho que propicia la inestabilidad en la federación de naciones e interviene directamente. Consigue en Bayona que le cedan la corona española, que entrega
a su hermano José I.
La reacción patriótica ante la presencia de franceses en
España y la guerra de la independencia hacen emerger instituciones de carácter
liberal y la elaboración de la primera constitución.
Fin de la guerra en 1814 y vuelta al trono de Fernando VII,
que restablece el absolutismo.
2. Fin del reinado de Carlos IV
2.1 España en la Europa de Napoleón
Napoleón interviene cada vez más en los asuntos españoles.
Fuerza a Carlos IV a declarar la guerra
a Inglaterra y como consecuencia se produce el desastre de Trafalgar, donde
se destroza la flota franco-española.
Tras el decreto
imperial de Berlín que establece el bloqueo
continental contra Inglaterra, Napoleón firma con España el Tratado de Fontainebleau en 1807, el
despliegue del ejército francés en toda la Península y por el cual se decide el
reparto de Portugal y el nombramiento de Manuel Godoy como príncipe de los
Algarves.
2.2 Inestabilidad de la Corona e
intervención imperial.
España se encuentra con grandes dificultades económicas
debido a la participación en numerosas guerras, la subida de precios y la deuda
pública.
En la Corte se hace cada vez más clara la división de fuerzas
en torno a los seguidores de Godoy y los de Fernando VII.
La entrada en España de tropas francesas acelera la crisis de
la Corona española, encabezando Fernando la oposición contra las tropas
napoleónicas. Los partidarios de Fernando
VII actúan iniciando una conspiración palaciega, con el motín de Aranjuez.
La residencia veraniega de la corte española es asaltada por una multitud que
fuerza la abdicación de Carlos IV a favor de su hijo y la prisión de Godoy.
Desde Francia Napoleón observa la inestabilidad de la Corona
española y decide precipitar los acontecimientos e intervenir en el problema.
Tras la ocupación de Madrid por el general Murat y el traslado a Francia de
Carlos IV el emperador convoca a padre e hijo en Bayona, donde logra la abdicación de Fernando en su padre y la de
este en Napoleón, que cede el trono a su hermano José I.
3. Los inicios de la guerra de la Independencia.
La relación entre la población española y las tropas
francesas es cada vez más tensa. La tarde del 1 de mayo y el día 2 de
1808 los acontecimientos se aceleran al sospecharse que el infante Francisco de
Paula va a ser trasladado también a Francia. La llamada a la acción de una
parte de la población y de algunos capitanes de artillería provoca un fuerte
enfrentamiento ante el Palacio real de Madrid. Los combates tienen un saldo de
405 muertos y anticipan la guerra de la independencia.
La resistencia popular
tiene que crear un poder alternativo que sostenga y dirija la lucha contra las
tropas francesas. Primero en Asturias y más tarde en el resto del territorio
nacional surgen de forma espontánea las Juntas
Provinciales, que organizarán y dirigirán las acciones militares y
políticas.
4. Fuerzas contendientes y
desarrollo de la guerra.
4.1 Etapa de ocupación y
levantamiento. Primeros éxitos. (1808)
Comienza con el despliegue de los cuerpos del ejército
francés.
El tercer cuerpo toma Barcelona y trata de tomar Zaragoza,
pero es detenido en el Bruch. El cuarto cuerpo del ejército se despliega por el
norte, con guarniciones en Burgos, Vitoria, San Sebastián y Pamplona. Desde
ellas asedia Zaragoza.
El primer y segundo cuerpos se establecen en el centro, al
mando de Dupont y Moncey, con el objetivo de tomar el control de los puertos
del sur y el este. Moncey fracasa en su camino hacia Valencia y se ve forzado a
retroceder. Las tropas francesas que se dirigen a Cádiz se ven hostigadas por
las fuerzas del general Castaños, que detiene a los franceses en Bailén. Esta
es la primera derrota de las tropas
napoleónicas. Como consecuencia, los franceses junto al rey José I abandonan Madrid y retroceden hasta Vitoria.
4.2 Etapa de Hegemonía francesa.
Las guerrillas (1808-1812)
Napoleón decide
intervenir
directamente y va a España al frente de su armada, Grande Armé. Se produce una
movilización de las mejores tropas francesas, que consiguen victorias
importantes en Burgos, Tudela y Uclés. Como consecuencia capitulan Zaragoza y
Madrid; en esta última ciudad Napoleón y sus hombres obligan a la Junta Central
a trasladarse hacia el sur. José I se instala de nuevo en Madrid desde donde el
emperador inicia una ofensiva contra las tropas inglesas. En 1810 Napoleón
abandona España.
Al comenzar 1810 el ejército francés ha conquistado casi todo
el país, excepto Lisboa, algunas zonas gallegas y Cádiz. Como consecuencia de
las derrotas sufridas las autoridades españolas llevan a cabo un cambio de
estrategia en la guerra.
Consiste en las guerrillas,
un grupo de hombres que se dedican a hostigar al enemigo forzándole a dispersas
sus tropas. Estas guerrillas tienen las siguientes características:
- Inferioridad militar, se reducen los enfrentamientos en campo abierto.
- Apoyo de la población, que suministra y facilita las comunicaciones.
- Desarrollo de un sistema ágil y efectivo de propaganda.
- Desarrollo de una guerra de desgaste que provoca el hundimiento moral del adversario.
- Una gran movilidad de sus efectivos.
4.3 Etapa de ofensiva final
hispano-inglesa (1812-1814)
Con el comienzo de la campaña para la invasión de Rusia el
sentido de la guerra cambia bruscamente. Las tropas hispano-inglesa cosechan
notables éxitos, entre ellas las victorias de Arapiles, Vitoria y San Marcial.
A causa de las derrotas las tropas francesas se van y Napoleón devuelve el poder a Fernando VII, tras
el tratado de paz de Valencay.
5. El desarrollo político durante
la guerra.
La incapacidad de respuesta a la invasión francesa por parte
de los organismos tradicionales de España hace que un sector minoritario de la
opinión pública aproveche para demandar nuevas estructuras de poder capaces de
situar al país en el liberalismo que la Ilustración había impulsado en el mundo
occidental.
Se desarrollan dos proyectos políticos diferentes: uno por los
afrancesados que consideran que la
presencia del emperador garantiza la modernización de España y colaboran con el
invasor. Y otro el liberal que
encabeza la respuesta patriótica a la presencia de los franceses y reivindica
la eliminación del Antiguo Régimen y sustituirlo por uno liberal.
Los liberales son los administradores del poder, por medio de
las Juntas, hacen un gobierno paralelo a Napoleón.
6. Los afrancesados.
Numeroso grupo de españoles que colaboraron con las
autoridades francesas por diversos motivos: el mantenimiento del puesto de
trabajo en los ministerios, convencimiento de que la presencia de Napoleón
modernizaría España. Son funcionarios e intelectuales.
Después de la proclamación de José I como rey de España y de
las Indias, se convocan en Bayona las Cortes españolas, en las que un reducido
número de diputados redacta y aprueba el Estatuto
de Bayona:
- La libertad individual y de imprenta.
- La supresión de los privilegios.
- La abolición del tormento.
- La limitación de los mayorazgos.
- La consolidación de la deuda pública
- La admisibilidad de los españoles a todos los empleos.
- La escuela para niños.
7. El proyecto liberal. Las Cortes
de Cádiz.
Durante los primeros meses de la guerra se constituyen trece Juntas provinciales que asumen todo el
poder. Suelen estar monopolizadas por personas del Antiguo Régimen.
Por debajo se sitúan las Juntas
Locales, órganos de representación popular, personajes que no admiten las abdicaciones
de Bayona y esperan la vuelta del Antiguo Régimen.
Y La Junta Central,
un gobierno central alternativo formado por Floridablanca a la cabeza. Su sede
se instala inicialmente en Aranjuez, luego en Sevilla y finalmente en Cádiz.
Promueve la convocatoria de las Cortes, dando una respuesta legal al Estatuto
de Bayona.
En 1810 se decide la convocatoria de Cortes a la que acuden
diputados elegidos por los españoles mayores de 25 años. Para contar con
representación de los territorios americanos se designan 26 diputados entre los
americanos residentes en España. También se decide nombrar diputados suplentes
de aquellos territorios invadidos por los franceses.
7.1
Sectores sociales representados en las Cortes.
En la primera reunión
de Cortes son suplentes 47 de los 104 diputados. Una tercera parte de
eclesiásticos y una sexta parte de nobles.
7.2. Sectores Políticos.
Tres tendencias políticas: Los liberales, los absolutistas y los ilustrados. En Cádiz se
impone la ideología liberal y su concepción del Estado moderno.
Pronto quedan en manifiesto las diferentes posiciones de unos
y otros: Absolutistas, las Cortes
deben limitarse a aprobar los presupuestos y las contribuciones de guerra; Liberales e Ilustrados, las Cortes han
de convertirse en la primera institución del reino, a la que deben estar
subordinadas todas las restantes.
8. Obra legislativa de las Cortes.
8.1. La Constitución de 1812.
La primera constitución española es promulgada el 19 de marzo de 1812.
La Constitución de
Cádiz es la más extensa de nuestra historia, consta de 384 artículos que
asumen los principios esenciales del liberalismo, como: soberanía nacional,
división de poderes, derecho de representación popular y derecho de propiedad.
Será el referente del progresismo español.
· Sistema de representación. Las Cortes, en una única Cámara,
asumen el poder legislativo, el órgano de representación de la soberanía
nacional. La representación popular es elegida por sufragio indirecto en tres
grados.Las funciones de los diputados son de
legislar, establecer impuestos, proteger la libertad de imprenta y nombrar a la
regencia.
· Rey. La corona hereditaria tiene limitadas sus
competencias. El rey no tiene capacidad para disolver las Cortes pero si tiene
capacidad para vetar las leyes que elaboran las cortes durante dos
legislaturas.
· Poder ejecutivo. Ejecutivo de carácter dual, con un
gobierno formado por siete secretarios de despacho que responden ante las
Cortes y el rey que dirige la acción del Gobierno, tiene capacidad legislativa
y goza de irresponsabilidad e inviolabilidad.
·
Poder judicial. El estado es quien aplica las leyes,
aunque se mantiene un fuero especial para eclesiásticos y militares. Se
establece una unidad de códigos en materia criminal, civil y comercial.
· Administración local y provincial. La local corresponde a los
Ayuntamientos, con funciones de beneficencia y obras públicas. La provincial,
ámbito administrativo y electoral y son designados para la representación del
Estado un jefe político nombrado por el rey y una Diputación.
·
Fuerzas armadas. Se crea la Milicia Nacional, que
defiende los valores del liberalismo y la Constitución de Cádiz.
· Relaciones Iglesia- Estado. Los asuntos se tratan en una Cámara
en la que los eclesiásticos tienen amplia representación. La religión católica
como religión oficial, se prohíbe cualquier otra.
·
Educación. Todos los Ayuntamientos tienen que
crear escuelas de primeras letras.
El regreso de Fernando VII supone la anulación de la Constitución.
8.2. Los decretos sociales y
económicos.
La Constitución de Cádiz es la destrucción del Antiguo Régimen.
Quedan abolidos los señoríos jurisdiccionales, se elimina la
inquisición, se permite la libertad de contratación en los campos y fábricas,
acaba con los gremios. No es un cambio
radical.