Comentario del Manifiesto de Sandhurst.
Nos
encontramos ante un texto histórico de naturaleza política, ya que se trata de
un manifiesto; firmado por el príncipe de Asturias, el futuro Alfonso XII. Casi
con total seguridad, se puede afirmar que fue redactado por Antonio Cánovas del
Castillo.
Alfonso XII,
era hijo de Isabel II y había cumplido 17 años
. Exiliado tras “la Gloriosa”, estudió en varios países y terminó su formación en la academia militar británica de Sandhurst, lugar donde firmó, el 1 de Octubre de 1874, este texto en el que proponía un cambio en España.
. Exiliado tras “la Gloriosa”, estudió en varios países y terminó su formación en la academia militar británica de Sandhurst, lugar donde firmó, el 1 de Octubre de 1874, este texto en el que proponía un cambio en España.
Cánovas del
Castillo había ocupado anteriormente varios cargos con los gobiernos de la
unión liberal. Durante el Sexenio democrático creó el partido Alfonsino, y a
partir de 1873 pasó a dirigir una vuelta en toda regla de los Borbones a
España. Cuando el general Martínez Campos proclamó rey a Alfonso XII, Cánovas
rápidamente asumió el ministerio regencia a la espera del rey.
El Sexenio,
finaliza a finales de 1874 debido a diversas causas que no pudieron solucionar
los sistemas políticos establecidos: el cantonalismo, la tercera guerra
carlista y la guerra de los 10 años contra los independentistas cubanos.
En este clima
el general Pavía disuelve las Cortes que pretendían buscar un sustituto a
Emilio Castelar. El 4 de enero de 1874, el general Serrano instaura una
República autoritaria y posteriormente, Cánovas del castillo acelera la
restauración y Martínez Campos da un golpe de Estado a finales de 1874 en
Sagunto y proclama a Alfonso XII como rey de España. Seguidamente se constituía
el ministerio regencia presidido por Cánovas y se inicia la restauración, que
no solo significa una vuelta de los Borbones, sino también un dominio del
liberalismo dogmático y la preponderancia de la oligarquía.
Dos son las
ideas principales: Alfonso se reconoce como el legítimo heredero de la corona
española. Por otro lado el manifiesto expone un programa político que
estabiliza al país, basado en la reconciliación y en las Cortes, para
normalizar la vida política española en la que se combinan tradición y
modernidad.
Quizás el
mejor resumen del manifiesto se da al final: “ni dejaré de ser buen español, ni
como todos mis antepasados, buen católico, ni como hombre de siglo, verdaderamente liberal “.
Alfonso XII había
firmado el manifiesto de Sandhurst, programa de la monarquía, garantizando el
sistema político liberal. La mayor parte de militares apoya al monarca, Serrano
dimite y posteriormente parte al exilio.
Este
pronunciamiento suponía el fin de un periodo de gran inestabilidad y la
restauración de los Borbones en España; no obstante, se recurrió a un método
que no agradará al autentico artífice del proyecto restaurador, Cánovas del
Castillo, ya que su intención era formar una amplía opinión pública favorable a
la vuelta del joven príncipe y poco a poco entrar en el poder de una manera
pacífica.
Cánovas
consiguió una gran etapa de estabilidad política basada en un sistema político
regido por los valores conservadores de orden, propiedad y monarquía,
combinados con aspectos e instituciones liberales. El sistema político se basa
en el turno de partidos; con este sistema se alternaban en el poder dos
partidos, el liberal de Sagasta que se alternaba con el conservador de Cánovas.
Había otros partidos, pero había un falseamiento sistemático de las elecciones,
por lo que nunca hubo posibilidad de que otros partidos ocuparan el poder, ya
que los caciques aseguraban la alternancia política.
La
restauración tuvo como opositores movimientos de todo tipo, como el republicanismo
federal, los carlistas o los partidos y sindicatos obreros. El partido carlista
tardó bastante en organizarse, y por otro lado el movimiento obrero cobró cada
vez más importancia, sobre todo en los sindicatos anarquistas, aunque también
el socialismo tuvo gran difusión, tras la fundación del PSOE en 1879 por Pablo
Iglesias.